Como muchos expertos predecían, el problema ahora del mundo no parece ser económico, sino quienes tendrán derecho a la vacuna, un derecho que debería ser de toda la población mundial, pero a los efectos de la realidad, las vacunas las obtendrán en primera instancia los países ricos.
Y es que de todos los países del mundo, los ricos son una minoría en comparación con tantos países pobres, los cuales se han quedado sin la posibilidad de obtener las vacunas que pongan fin a este virus que tanto daño ha dejado en toda la tierra, por ello hay que preocuparse y hacer acuerdos para que la adquisición de las vacuas no sea solo para los países poderosos.
El problema es mundial, no local
Muchos países han actuado de manera egoísta y quieren comprar muchas dosis para inmunizar a la mayor parte de su población en primera instancia, pero no se dan cuenta de que esto no les serviría de nada si el virus sigue extendiéndose en el resto del mundo.
Así que hay que pensar con inteligencia, y no dejar que las ganas de contener el virus de una vez en estos países desarrollados deje a los países pobres sin posibilidad de inmunizar aunque sea a una parte de la población, porque hay que prevenir rebrotes, es como cuando se instalan en casa puertas acorazadas para prevenir robos.
Está claro que es necesario prevenir cualquier tipo de rebrote a nivel mundial, especialmente en los países inmunizados, ya que se sabe que el virus muta y que hay peligro de reinfección, así como ocurre con la seguridad de una casa, hay que estar siempre preparado y evitar robos a toda costa, una estrategia para ello es utilizar puertas acorazadas para evitar la entrada fácil de los ladrones.
Los países menos privilegiados alzan la voz
Países como México ya han hecho público su preocupación por una monopolización de las vacunas, y es que ciertamente países como Estados Unidos, Rusia, Alemania, Reino Unido y en general la Unión Europea ya tienen acaparadas todas las dosis que se fabricarán este año.
También Rusia ha dicho que los pedidos que tienen para su vacuna sobrepasan su capacidad de producción y que para este año habrá algunos países que se quedaran sin sus dosis de las vacunas, una situación que preocupa grandemente a algunos países.
La preocupación no es tanta para los países que quizás no tengan acceso a las vacunas peo tienen como adquirirlas, ya que hay países que no solo no tienen acceso a las vacunas, sino que tampoco tienen presupuesto para su adquisición.
Los países más poderosos deben ser generosos
Los países con más poder en el mundo, precisamente aquellos que ya han comprado en su mayoría todas las dosis de las vacunas existentes, serán los primeros en ser inmunizados, pero deben saber que el virus hay que erradicarlo no solo de sus países, sino del mundo entero, por ello deberán hacer préstamos y donar algunas dosis de vacunas a los países pobres.